herramientas para solucionar problemas lógicos o de estructura de ficheros del disco

Los programas analizados son excelentes herramientas para solucionar problemas lógicos o de estructura de ficheros del disco. Es decir problemas ocasionados por un fallo de escritura que provoque la corrupción del disco, virus o borrados accidentales por parte del usuario. Sin embargo, si el foco del problema es un daño físico al disco, como puede ser una caída, golpes, daños por ondas electromagnéticas o incluso incendios, debemos acudir a profesionales, ya que, probablemente, las partes mecánicas del mismo se encuentren dañadas, y por mucho que lo conectemos a un PC, no funcionarán correctamente sin la debida reparación. De hecho, en el peor de los casos, podemos incluso agravar la situación.
Software de recuperación
Además, los servicios profesionales dedicados a la recuperación de información, si bien tienen un coste elevado, disfrutan de una tasa de éxito que se encuentra entre un 85 y un 90%, según Recovery Labs, empresa especializada en la recuperación de datos. Realmente resulta sorprendente que, por muy graves que sean los daños recibidos por el disco, gracias al empleo de material específico en cámaras limpias, es posible salvar gran cantidad de información.
Aunque parezca obvio, si el equipo ha sufrido daños físicos, debemos abstenernos de manipular o abrir el disco bajo ningún concepto, este es el camino más directo para la pérdida permanente de nuestra información.
Borrado seguro de datos
Disponer de la posibilidad de «resucitar» nuestros ficheros borrados es algo fantástico y puede salvarnos de más de un aprieto. Sin embargo, el enfoque cambia si pensamos en la oportunidad que se abre ante otras personas de utilizar esta técnica en nuestra contra.
Algo muy factible, a tenor de un estudio realizado por dos estudiantes del MIT a partir de discos duros procedentes de subastas en Internet, ya que consiguieron recuperar información de más del 43% de las unidades, subrayando que más del 70% de esta era de carácter privado o confidencial.
Software de recuperación
Para borrar la información confidencial, es importante utilizar los llamados programas de borrado seguro. Los métodos que usan para la eliminación de ficheros difieren sustancialmente de la utilizada por el sistema operativo, rellenando el espacio que anteriormente empleaban los archivos con información aleatoria. Pudiendo repetir esta información un elevado número de veces, para asegurar la imposibilidad de su recuperación. Una buena opción gratuita es Eraser (http://eraser.heidi.ie) o Freeraser (www.codyssey.com).
También existen sistemas hardware para el borrado seguro, que utilizan ondas electromagnéticas para destruir toda la información contenida en un soporte electrónico; como por ejemplo el desmagnetizador Ontrack Eraser Degausser, que eliminará todo rastro en solo cuatro segundos. Eso sí, debido a su precio, está dirigida al ámbito profesional. Podemos ver estas máquinas como la versión moderna de las destructoras de documentos en papel.
¿Es recomendable congelar el disco duro para recuperar datos?
Quizá hayamos oído alguna vez la historia de un disco duro defectuoso, el cual, tras mantenerlo en el congelador durante unas horas, ha revivido lo suficiente para extraer documentos que parecían perdidos. ¿Realidad o tan solo una leyenda urbana?
Software de recuperación
A decir verdad, sí es posible que, en determinadas circunstancias, este «remedio de la abuela», pueda llegar a funcionar. Esto se produce en discos en los que las partes mecánicas han sido dañadas y que, al contraerse por el frío, pueden hacer que el disco funcione unos minutos antes de volver a dilatarse.
Sin embargo, por curiosa que resulte, desde aquí, no os animamos a utilizar esta solución, ya que, si es posible recuperar los datos con esta operación, una empresa especializada los recuperará con absoluta seguridad. Y sin necesidad de poner en riesgo la integridad de los mismos.
Un último consejo: si a pesar de las contraindicaciones, queréis experimentar con este procedimiento, ¡aseguraros de envolver el disco en una bolsa impermeable antes de introducirlo